¿Por qué sube el dólar frente al peso Colombiano?
Por: WebTeam en julio 7, 2022
Al menos en el corto plazo, previsiones parecen estar haciéndose realidad (aunque por varios factores, no solo el electoral): el dólar se cotizaba este miércoles a 4.352,6 pesos colombianos, según Reuters, un salto de casi 11% desde los 3.905 pesos por dólar del 19 de junio, cuando Petro ganó las elecciones.
El viernes el dólar ya había llegado a 4.205 pesos colombianos, antes del fin de semana y del feriado de este lunes en Estados Unidos por el 4 de julio, que contuvo la trepada hasta la apertura de los mercados el martes.
Superó de esa manera el pico de 4.180 pesos colombianos por dólar en marzo de 2020, al inicio de la pandemia de covid-19, y este miércoles ha pasado nuevamente el récord.
En tanto, la devaluación del peso colombiano llega al 12,78% en lo que va del año, y es un 7% interanual, según datos del Banco de la República.
Más allá del impacto de las elecciones, la apreciación del dólar en Colombia no es solo un fenómeno de los últimos meses. Con altibajos, mantiene una tendencia alcista al menos desde abril de 2018, cuando se cotizaba en 2.707 pesos colombianos.
Y más débil era aún el dólar en julio de 2014, cuando se cotizaba en 1.843 pesos colombianos.
¿Qué pasó, entonces?
A partir de mediados de 2014, el dólar comenzó a apreciarse en todo el mundo en el marco de la caída del precio de las materias primas, según el Banco de la República, y Colombia, cuyas exportaciones petroleras son muy importantes, no fue la excepción.
En un contexto mundial de alta inflación y escasez de recursos e interrupciones en la cadena de suministro por cuenta de la guerra de Rusia en Ucrania, la devaluación del peso colombiano y otras monedas es una realidad.
Hay que decir, además, que el caso colombiano no es único: el dólar ha subido frente al euro, al peso argentino y al peso chileno, por ejemplo
El impacto de las elecciones
“Los operadores de mercado van a sentir un efecto de crecimiento en la demanda por parte de unos individuos que se pueden sentir nerviosos ante el nuevo presidente y sus políticas económicas”, dijo en junio Isidro Hernández Rodríguez, profesor de Economía de la Universidad Externado de Colombia, a CNN, tras las elecciones de segunda vuelta en las que triunfó Petro.
El jueves pasado Petro dijo a través de su cuenta de Twitter que José Antonio Ocampo será su ministro de Hacienda, uno de los nombramientos más esperados de su futuro gabinete, con el que asumirá la presidencia el 7 de agosto.
“José Antonio Ocampo será nuestro ministro de Hacienda. Construir una economía productiva y una economía para la vida”, tuiteó .
Fue un anuncio clave que ha sido muy bien recibido por diversos sectores, pues la trayectoria de Ocampo es una señal para la economía de mercado y los inversionistas, a la vez que es considerado como un respaldo para el manejo de la agenda progresista de Petro.
Sin embargo, el dólar continuó subiendo.
El contexto internacional
En el mediano plazo, la clave para definir la tendencia del dólar serán los “desarrollos internacionales”, había dicho la analista de Scotiabank Colpatria, Jackeline Piraján, en un documento compartido con CNN en junio.
“No esperamos que la tasa de cambio baje mucho más de los 3.750 pesos colombianos” porque “el contexto de tasas más altas a nivel internacional genera un fortalecimiento global del dólar”, dijo.
En un informe compartido este lunes con CNN, Piraján destaca que “en los últimos días hemos tenido una composición mixta en la que los bancos centrales siguen agresivos anunciando más subidas de tasas de interés, esto genera que el dólar se fortalezca frente al grueso de monedas internacionales, tanto las de países desarrollados como las de los emergentes”.
La explotación petrolera, en la mira
Petro, según lo que indica su programa de gobierno, quiere poner fin al extractivismo gradualmente y afirma que prohibirá la exploración y explotación de yacimientos no convencionales, detendrá los proyectos piloto de fracking y el desarrollo de yacimientos costa afuera, no dará nuevas licencias para la exploración de hidrocarburos ni permitirá la gran minería a cielo abierto.
La institución de investigaciones económicas Corficolombiana publicó el 14 de junio, días antes de la segunda vuelta, un análisis sobre el impacto estimado de una supuesta suspensión de nuevas exploraciones de hidrocarburos a partir de 2023 y hasta 2027.
En ese escenario, dice la empresa, el peso colombiano se devaluaría entre 39.9% y 43,7% para 2027 y la tasa de cambio se situaría entre 5.080 y 7.000.